QUITO, ECUADOR, 18 de octubre de 2016. En respaldo de la Nueva Agenda Urbana adoptada esta semana durante la conferencia mundial Hábitat III, auspiciada por las Naciones Unidas, ocho bancos multilaterales de desarrollo (BMD) han comenzado a poner en práctica el contenido de dicho documento emitiendo una declaración conjunta en la que expresan su compromiso de promover la urbanización y las comunidades urbanas equitativas, sostenibles y productivas.
En la sesión de la conferencia Hábitat III titulada “La Nueva Agenda Urbana y la Función de los Bancos Multilaterales de Desarrollo”, ocho BMD (el Banco Asiático de Desarrollo, el Banco Africano de Desarrollo, el Banco de Desarrollo de América Latina, el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, el Banco Europeo de Inversiones, el Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco Islámico de Desarrollo y el Banco Mundial) presentaron sus planes de trabajo en conjunto con el objetivo de garantizar que los programas que respaldan promuevan un modelo de desarrollo urbano que aliente los asentamientos equitativos, sostenibles, inclusivos y productivos, entre los que se incluyen las pequeñas comunidades rurales, los pueblos de importancia comercial, las ciudades intermedias y las metrópolis.
“La Nueva Agenda Urbana contempla ciudades y asentamientos humanos inclusivos, sostenibles y resilientes, que promuevan la prosperidad y la calidad de vida de todos”, afirmó Ede Ijjasz-Vasquez, director superior de las Prácticas Mundiales de Desarrollo Social, Urbano y Rural, y Resiliencia del Banco Mundial. “En vista de que el financiamiento necesario para infraestructura urbana excede los USD 4,5 billones al año (un monto que no puede alcanzarse únicamente con los flujos actuales de asistencia oficial para el desarrollo), para resolver los desafíos urbanos será necesario encontrar instrumentos de financiamiento innovadores en todas las fuentes posibles: fondos nacionales y locales, ciudadanos, entidades filantrópicas y BMD”.
Ijjasz-Vasquez añadió: “El Banco está convencido de que, trabajando en conjunto con los Gobiernos y los asociados para desarrollar formas eficaces e innovadoras de planificar, conectar y financiar las ciudades, puede contribuir de manera concreta a configurar un desarrollo urbano sostenible y de largo plazo. Los desafíos que presenta la urbanización son enormes, pero también lo son las oportunidades que conlleva. Estamos listos para encarar este desafío decisivo que moldeará el futuro de nuestras ciudades y nos permitirá alcanzar nuestros objetivos de poner fin a la pobreza e impulsar la prosperidad compartida”.
En consonancia con sus respectivos mandatos y sus estructuras de gestión institucional, las organizaciones se comprometieron a promover la coordinación entre los planes de desarrollo urbano, regional y nacional, fortaleciendo las capacidades de los organismos de planificación y mejorando el acceso al financiamiento en todos los niveles de gobierno y en el sector privado.
En su declaración conjunta, guiados por sus propios mandatos institucionales y por los objetivos de desarrollo de los países miembros, los BMD se comprometieron a respaldar la implementación de la Nueva Agenda Urbana de las Naciones Unidas mediante el financiamiento directo y la movilización de otros recursos y de fondos internos de los países. En tal sentido, están decididos a continuar trabajando para fortalecer los mercados financieros locales, profundizar la inclusión financiera y atraer fuentes de cofinanciamiento para generar instrumentos innovadores y fondos en condiciones concesionarias que permitan abordar los desafíos de los residentes urbanos pobres y más vulnerables.
Para obtener más detalles, véase el texto completo de la declaración conjunta.
