Desafíos
A fines de 2001, después de la caída del régimen talibán y casi tres décadas de conflicto, Afganistán (i) enfrentó un conjunto enorme de desafíos. A partir de esta grave situación, se han logrado avances muy significativos. En 2010, el Gobierno de Afganistán inició el Proceso de Kabul, cuyo objetivo es apoyar el liderazgo y la responsabilidad plena de los afganos en el desarrollo del país en los próximos años. El Gobierno ha puesto en marcha 23 programas prioritarios nacionales (NPP, por sus siglas en inglés) que cubren áreas, tales como buen gobierno, prestación de servicios e infraestructura. El Gobierno pidió a los donantes que adaptaran sus programas a los NPP para coordinar y dirigir los esfuerzos de desarrollo en apoyo de los principios de eficacia de la ayuda.
Enfrentar los desafíos
El compromiso actual del Banco Mundial con Afganistán está determinado por la nota de estrategia provisional, (i) que guarda una estrecha correlación con la Estrategia de Desarrollo Nacional del Gobierno de Afganistán. El respaldo del Banco Mundial a Afganistán en el periodo 2012-14 busca apoyar el logro de algunas de las prioridades nacionales más importantes del país. También pretende ayudar al Gobierno a gestionar la difícil transición de una situación de seguridad y desarrollo dirigida por la comunidad internacional a una que liderará el Gobierno a fines de 2014. El Grupo del Banco Mundial proporciona apoyo en tres temas:
1. Fortalecimiento de la legitimidad y capacidad institucional.
2. Prestación equitativa de servicios.
3. Empleos y crecimiento inclusivo.
Contribución del Grupo del Banco Mundial
El Banco cumple con su programa a través de donaciones de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), por un monto de unos US$150 millones anuales, al igual que donaciones del Fondo Fiduciario para la Reconstrucción de Afganistán (ARTF, por sus siglas en inglés), (i) que podría proporcionar potencialmente hasta US$800 millones al año durante el periodo de la nota de estrategia provisional (2012-14). La Corporación Financiera Internacional (IFC)[MIS3] , la institución del Banco Mundial dedicada al sector privado, también está fortaleciendo su apoyo a empresas del sector privado y mejorando el clima para los negocios.
Desde 2001, la AIF ha aportado al Gobierno de Afganistán US$2750 millones en financiamiento para un gran número de proyectos de desarrollo y reconstrucción de emergencia. Este apoyo incluye US$2310 millones en donaciones y US$436,4 millones en préstamos sin intereses también conocidos como "créditos". A enero de 2014, la AIF tenía 20 proyectos activos en el país con compromisos netos por casi US$1000 millones.
En reconocimiento de los enormes desafíos que representa un entorno posterior a un conflicto, la AIF ha proporcionado niveles excepcionales de apoyo financiero a Afganistán. El respaldo de la AIF hace hincapié en los programas nacionales que están mejorando la vida de millones de afganos en todo el país en las áreas de salud, educación, desarrollo rural y administración de las finanzas públicas.
IFC ha prestado apoyo a través de inversiones por un total de US$90 millones, así como asesoría en siete intervenciones en las esferas de acceso al financiamiento, reforma del clima para las inversiones, negocios agropecuarios, capacitación de pequeñas y medianas empresas y asociaciones público-privadas. Además, IFC está trabajando para aumentar sus compromisos con el sector privado y evaluando la posibilidad de incrementar su labor de asesoramiento en diferentes áreas.
El Fondo Fiduciario para la Reconstrucción de Afganistán ha sido en los últimos 12 años la mayor fuente de financiamiento externo del presupuesto del país que apoya los programas prioritarios nacionales, los costos operativos del Gobierno y los salarios, así como el programa de reforma de políticas. Incluye respaldo para proyectos de desarrollo en materia de salud, educación, desarrollo rural e infraestructura. Desde su creación, 33 donantes han aportado al ARTF un total de US$6000 millones. Es administrado por el Banco Mundial, en estrecha cooperación con el Gobierno de Afganistán —representado por el Ministerio de Hacienda—, y muchos donantes.
El Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA), la institución del Banco Mundial que ofrece seguros contra riesgos políticos y mecanismos de mejora crediticia, promueve la inversión extranjera directa en las economías emergentes para apoyar el crecimiento económico, reducir la pobreza y mejorar la vida. Los compromisos brutos de MIGA en Afganistán ascienden a US$153 millones, respaldando proyectos de telecomunicaciones y agroindustria. MIGA ha puesto en marcha recientemente su "servicio financiero para economías frágiles y afectadas por conflictos ", lo que aumentará la participación del Organismo en Afganistán. En la actualidad, MIGA apoya dos proyectos en el país, uno en la industria Traitex y otro que es un esfuerzo conjunto con IFC en el sector de las telecomunicaciones (MTN).