Desafío
Al momento de diseñar el proyecto, el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN) enfrentaba serios desafíos en su capacidad. El IDAAN había mantenido las mismas tarifas desde 1982 (al 50% de su valor real), y para 2008 el déficit operacional del IDAAN alcanzaba los US$34 millones. En lugar de centrarse en mejorar la eficiencia y calidad del servicio en áreas urbanas, el IDAAN se había concentrado en mantener el statu quo y responder emergencias. El Instituto enfrentaba desafíos particulares como garantizar la calidad del servicio en barrios de bajo ingreso. En Colón aproximadamente 30% de sus 165.000 habitantes carecía de acceso a un servicio de agua confiable y apenas 38% de sus barrios registraba servicio de 18 a 24 horas por día (muy por debajo del promedio nacional de 70%). La Unidad de Negocios Colón era una de las unidades con peor desempeño del IDAAN, en tanto que la tasa de cobro de tarifas era aproximadamente de 40% de la facturación y el agua no facturada de 54%.
Enfoque
El Proyecto de Mejoramiento del Abastecimiento de Agua y el Saneamiento en la Zona Metropolitana surgió como respuesta a los problemas de capacidad del IDAAN y a los considerables desafíos operacionales en Colón. El equipo del Banco Mundial sugirió la utilización de un contrato basado en desempeño (Performance-Based Contract, PBC) para la construcción, rehabilitación y reparación necesarias para mejorar tanto la eficiencia comercial como operacional de la Unidad de Negocios Colón y la continuidad en su servicio de agua. Dado que IDAAN no tenía experiencia en PBC, el equipo del Banco, apoyado en una subvención consultiva público privada para infraestructura (TF011135) de US$70.000, convocó a expertos internacionales para que ayudaran en el diseño e implementación del contrato y facilitó un evento de intercambio de conocimientos con el Ente Regulador de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento de Honduras. El PBC básicamente transfirió al contratista toda la responsabilidad por los resultados en tres indicadores clave. El 70% del valor del contrato se cubrió con pagos fijos, mientras que el 30% restante se utilizó para pagos variables acordes con los avances en el cumplimiento de indicadores con metas de desempeño clave. Se contrató una empresa internacional de supervisión de obras de ingeniería para monitorear la implementación del PBC y verificar de manera independiente el cumplimiento de los tres indicadores clave por parte del contratista.