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Panorama general

El mundo se enfrenta a una tormenta perfecta formada por el cambio climático, los conflictos y las crisis económicas y de la naturaleza que exacerban la desigualdad y empujan a más personas a la pobreza. Es necesario que se haga lo posible para garantizar que el planeta siga siendo habitable para todos.

El cambio climático significa precios de los alimentos por las nubes, aire tóxico y agua contaminada para los habitantes de los países en desarrollo, y deja a los países a tan solo un desastre natural de la pobreza, obligando a los padres a sacar a sus hijos de la escuela y a comunidades enteras a migrar.

Se debe encontrar una manera de financiar un mundo diferente, uno donde existe resiliencia climática, los alimentos y el agua son abundantes, y la pobreza ha sido derrotada.

  • Se deben construir hospitales que puedan soportar desastres naturales y caminos que no sean arrastrados por las lluvias. También la agricultura debe adaptarse, utilizando técnicas de cultivo para reducir las emisiones de metano y esquemas de protección social dirigidos a los agricultores en caso de pérdidas de las cosechas. Además, se tienen que restaurar los bosques y manglares para reducir el carbono y almacenarlo, así como proteger a las comunidades costeras.
  • El financiamiento público no es suficiente. Los países deben aprovechar nuevas fuentes de ingresos provenientes del sector privado. A su vez, el sector privado tiene que encontrar un entorno favorable para realizar inversiones climáticas críticas.
  • El Grupo Banco Mundial tiene una función clara que desempeñar en el apoyo a sus países clientes de modo que estén preparados para la transición resiliente con bajas emisiones de carbono, permitiéndoles construir economías climáticamente inteligentes que sean verdes, resilientes e inclusivas.