WASHINGTON, 10 diciembre de 2010- La Junta de Directores Ejecutivos del Banco Mundial aprobó ayer un financiamiento adicional para el Programa Nacional de Agua y Saneamiento Rural (PRONASAR) por US$30 millones para incrementar la cobertura y sostenibilidad de los servicios de agua y saneamiento en las zonas rurales de Perú.
A través de este nuevo préstamo, el Banco Mundial apoya los trabajos que PRONASAR viene realizando para asegurar que las comunidades más alejadas tengan acceso a más y mejores servicios de agua y saneamiento. Adicionalmente, este proyecto seguirá promoviendo la adopción de buenas prácticas de higiene a través de campañas de comunicación..
"PRONASAR ha logrado construir y rehabilitar sistemas de agua y saneamiento en 283 comunidades rurales a la fecha, lo que contribuye decididamente a mejorar la calidad de vida y la salud de las familias más vulnerables", dijo Vanessa Vereau, Coordinadora General de la Unidad de Gestión del Programa Nacional de Agua y Saneamiento Rural, del Ministerio de Vivienda Construcción y Saneamiento de Perú.
El financiamiento adicional proporcionará fuentes de agua potable a cerca 320.000 personas en aproximadamente 200 comunidades, a través de la ampliación y reparación de los sistemas de suministros de agua con énfasis en la creación y capacitación de Juntas Administradoras de Servicios de Saneamiento (JASS) para asegurar la sostenibilidad de los servicios. Los nuevos suministros podrán ser a través de redes de tuberías que tienen conexiones domiciliarias, piletas públicas, protección de manantiales, pozos o sistemas para la captura de agua de lluvia, de acuerdo a la preferencia y posibilidades de las comunidades que serán consultadas en el proceso previo a la construcción
"Las nuevas instalaciones serán sostenibles a largo plazo con una planificación eficiente y(mano de obra calificada que asegure la alta calidad de los servicios de agua, una adecuada formación de los responsables de las operaciones y una amplia educación en higiene. Estas inversiones contribuirán a mejorar la calidad de vida de las comunidades rurales", dijo Felipe Jaramillo, Director del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela.
El proyecto consta de tres componentes:
- Financiamiento de la construcción, rehabilitación y expansión de los sistemas rurales de agua y saneamiento; proporcionar soluciones de saneamiento in situ, así como asistencia técnica para el establecimiento de nuevas Juntas Administradoras de Servicios de Saneamiento (JASS) y el fortalecimiento de los preexistentes que permitan potenciar la educación en higiene.
- Provisión de asistencia técnica de manera piloto, para el establecimiento de operadores especializados, como cooperativas privadas o empresas municipales, para invertir en la gestión, rehabilitación, mejora y ampliación del abastecimiento de agua y servicios de saneamiento.
- Fortalecimiento de las capacidades del Vice-Ministerio de Saneamiento y la Dirección Nacional de Saneamiento en su política y sus funciones normativas relacionadas con el saneamiento rural, apoyo a las municipalidades distritales en su rol de monitores y control de los servicios y la formación de su personal, y los estudios seleccionados, así como la puesta a punto y mantenimiento de un Sistema de Información del Sector.
Esta operación es parte integral de un paquete del Banco Mundial que incluye financiamiento, asistencia técnica, conocimiento, y servicios de coordinación y convocatoria, para apoyar al gobierno y brindar mejores soluciones al problema de escasez de fuentes de agua por los efectos del cambio climático, de manera integrada.
El costo total de este proyecto asciende a US$ 50.9 millones de los cuales US$30 millones serán financiados por el Banco Mundial y US$ 20.9 millones por la contraparte gubernamental.
Este préstamo de inversión tiene una tasa de interés variable (LIBOR), con un plazo de amortización de 12 años e incluye un periodo de gracia de 11 años. La culminación del proyecto está programada para diciembre de 2013.