Se alcanzaron los factores de activación paramétricos acordados previamente para el pago total en función de la presión central y la trayectoria de la tormenta
CIUDAD DE WASHINGTON, 7 DE NOVIEMBRE DE 2025. Tras el paso del huracán Melissa, el Gobierno de Jamaica recibirá un pago total de USD 150 millones en virtud de la cobertura de seguro contra catástrofes que posee con el Banco Mundial, a través del respaldo de un bono para catástrofes emitido en 2024 por la entidad (Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento [BIRF], AAA/Aaa).
En el análisis realizado por la entidad de cálculo externo, AIR Worldwide Corporation, se llega a la conclusión de que el huracán Melissa alcanzó los requisitos paramétricos de activación acordados previamente que conducen al otorgamiento del total de fondos del bono para catástrofes del Banco Mundial, que ofrece a Jamaica protección financiera contra desastres naturales específicos. El análisis se basó en la presión central y la trayectoria de la tormenta, según informó el Centro Nacional de Huracanes.
Jamaica, uno de los países más expuestos a los desastres naturales, cuenta con una estrategia de financiamiento del riesgo de desastres bien establecida. El país accedió inicialmente a la cobertura de seguros contra tormentas que han recibido nombre a través de un bono para catástrofes emitido por el Banco Mundial en 2021, y tres años después renovó su protección con un bono para catástrofes en 2024. Para obtener más información sobre la estructura del bono, haga clic aquí.
Los bonos para catástrofes transfieren los riesgos financieros derivados de los desastres naturales a los mercados mundiales de capital, y son uno de los numerosos instrumentos financieros disponibles para apoyar a los países después de que se produzcan desastres naturales, como huracanes y terremotos. Los organismos de calificación crediticia reconocen que los bonos para catástrofes son beneficiosos para los países y forman parte de su conjunto de herramientas de gestión del riesgo de desastres.
“Acompañamos en este momento al pueblo de Jamaica, mientras se recupera y se reconstruye luego de la tragedia. La estrategia integral de gestión del riesgo de desastres y el enfoque proactivo de Jamaica sirven como modelo para los países que enfrentan amenazas similares y buscan fortalecer su resiliencia financiera frente a los desastres naturales”, dijo Jorge Familiar, vicepresidente y tesorero del Banco Mundial. “Este pago destaca el papel de los bonos para catástrofes como parte de las estrategias eficaces de gestión de riesgos y su eficiencia en la transferencia de riesgos de desastres a los mercados de capital”.
Además del pago total del bono para catástrofes, ya está listo un amplio paquete de asistencia del Grupo Banco Mundial en apoyo de Jamaica, que combina financiamiento de emergencia de desembolso rápido, la reasignación de fondos para proyectos existentes y apoyo específico al sector privado a través de la Corporación Financiera Internacional, la entidad del Grupo Banco Mundial dedicada al sector privado.
“Mientras Jamaica enfrenta las consecuencias del huracán Melissa, demuestra su fuerte compromiso con la preparación para emergencias; esto le permite pasar rápidamente del alivio a la recuperación y aprovechar este momento no solo para reconstruir, sino para dar el salto hacia una infraestructura más resiliente”, dijo Susana Cordeiro Guerra, vicepresidenta del Banco Mundial para América Latina y el Caribe. “El Grupo Banco Mundial apoya al Gobierno y al pueblo de Jamaica para lograr una reconstrucción más sólida, restablecer los medios de subsistencia y fijar un nuevo parámetro de referencia para la resiliencia en todo el Caribe”.
Los seguros contra catástrofes respaldados por bonos forman parte del conjunto de herramientas de preparación y respuesta ante las crisis del Banco Mundial, que proporciona a los países en desarrollo una serie de medios innovadores para responder mejor a las crisis y prepararse para conmociones futuras. Esto incluye el acceso rápido a dinero en efectivo para responder a emergencias, la ampliación de los seguros contra catástrofes y la opción de pausar los pagos del servicio de la deuda ante un desastre natural.