Quinientos millones de pequeños agricultores producen la mayor parte de los alimentos del mundo, pero muchos de ellos siguen sumidos en la pobreza, y dependen de métodos tradicionales y carecen de acceso a los mercados, el financiamiento y la tecnología. Proporcionarles apoyo para que sean exitosos en términos comerciales es fundamental para crear empleos, reducir la pobreza y mejorar la seguridad alimentaria mundial.
Durante la próxima década, 1200 millones de jóvenes ingresarán a la fuerza laboral en los países en desarrollo. Al mismo tiempo, el mundo necesitará un 30 % más de alimentos de aquí a 2050. Para satisfacer esta demanda, es necesario transformar la agricultura en un motor de oportunidades.
El Grupo Banco Mundial se comprometió a duplicar su inversión anual en la agroindustria hasta alcanzar los USD 9000 millones, porque este sector es una de las herramientas más poderosas para alimentar a 10 000 millones de personas y poner fin a la pobreza y el desempleo.



Satisfacer la demanda de alimentos del mañana
Qué se necesita para alimentar a 10 000 millones de personas en 2050 y quién lo hace posible.




