Se proyecta un crecimiento económico del 5.5% para 2025, impulsado por la estabilidad macroeconómica, las inversiones en energía y un sólido desempeño del sector agroindustrial.
En abril de 2025, Argentina inició un programa del Servicio Ampliado del Fondo (EFF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI), recibiendo un desembolso inicial de $12 mil millones de dólares. El Banco Mundial también proporcionó $1.5 mil millones de dólares en apoyo presupuestario.
Estos fondos respaldan la continuidad de la estabilización, la expansión de la protección para las poblaciones vulnerables y la promoción del comercio y las inversiones del sector privado. Esto forma parte de un esfuerzo internacional más amplio para fomentar el crecimiento y el empleo a largo plazo.