El BIRF y la AIF movilizan financiamiento para los países clientes a través de los mercados de capital mundiales. Como parte de la ampliación de las operaciones para abordar la pandemia de COVID‑19 en el ejercicio de 2020, obtuvimos niveles excepcionales de financiamiento y trabajamos para gestionar los riesgos sin dejar de prestar servicios de asesoría a los clientes. Gracias a los desembolsos rápidos de préstamos y donaciones en respaldo de proyectos de emergencia, ayudamos a los países a hacer frente a los impactos sanitarios, económicos y sociales de la pandemia. También aplicamos mecanismos sólidos de continuidad de las operaciones para garantizar que nuestros desembolsos prosigan sin interrupción y ayuden a los países a enfrentar los desafíos de desarrollo.
Aparte de obtener fondos para el BIRF y la AIF, la Tesorería del Banco gestiona USD 184 000 millones en activos del BIRF, la AIF y MIGA, así como de 76 clientes —incluidos bancos centrales, fondos públicos de pensión, fondos soberanos de inversión e instituciones financieras internacionales—, además de flujos de efectivo anuales por más de USD 7,6 billones en 125 monedas en 138 países.
Movilizar los mercados de capital y el financiamiento sostenible para apoyar a los países
El BIRF ha movilizado financiamiento para sus países clientes durante más de 70 años, y ha generado casi USD 1 billón desde su primer bono, emitido en 1947. En el ejercicio de 2020, generó USD 75 000 millones, gracias a su calificación crediticia de triple A y a su sólida posición en los mercados, para respaldar el mandato del Banco y ayudar a los clientes a gestionar el riesgo y generar resiliencia. En abril de 2020, en respaldo a los esfuerzos por ayudar a los países a afrontar la COVID‑19, generó USD 15 000 millones a través de bonos de desarrollo sostenible en un período de tres días, incluido un bono de USD 8000 millones a cinco años, el mayor bono emitido en la historia por una entidad supranacional.
La AIF brinda respaldo a los países más pobres del mundo, muchos de los cuales se enfrentan a grandes desafíos derivados de la COVID‑19. En el ejercicio de 2020, emitió USD 5000 millones y por primera vez realizó emisiones en otras monedas, como la libra esterlina (GBP), el euro y la corona sueca (SEK). La AIF también goza de una calificación crediticia de triple A y continúa extendiendo su actividad a nuevos mercados.
Incrementar el impacto en el desarrollo a través de bonos para el desarrollo sostenible y asistencia técnica
Ayudamos a desarrollar nuevas herramientas financieras que amplíen los mercados y proporcionen el financiamiento necesario para hacer frente a los desafíos de desarrollo más difíciles del mundo. Mediante la emisión de bonos de desarrollo sostenible, respaldamos el financiamiento destinado a una serie de prioridades que están en consonancia con nuestra misión de poner fin a la pobreza extrema y reducir la desigualdad. Estos bonos, además, ayudan a desarrollar los mercados de capital locales, especialmente en los países de ingreso bajo. En enero de 2020, emitimos el primer bono del BIRF denominado en francos ruandeses, para que los inversionistas internacionales tuvieran la oportunidad de ganar exposición en la pujante economía del país a través de su moneda. Se trata de la séptima moneda de África al sur del Sahara con la que opera el BIRF.
Los bonos de desarrollo sostenible ofrecen a los inversionistas la posibilidad de obtener una rentabilidad financiera mientras generan un impacto positivo, comunican sus prioridades de inversiones sostenibles y respaldan objetivos de desarrollo mundiales. En mayo de 2020, dimos a conocer el primer informe sobre el impacto de los bonos para el desarrollo sostenible. Esta publicación abarca todas las emisiones de bonos del BIRF y constituye una parte clave de nuestros esfuerzos por comprometer a los participantes del mercado, manteniendo estándares sólidos de transparencia y acceso a la información.
En abril de 2020, a fin de generar conciencia acerca de los programas de salud de los países y de nuestro respaldo a sus esfuerzos por responder a la COVID‑19, el BIRF emitió un bono de referencia a dos años por valor de SEK 11 500 millones y un bono de referencia a tres años por valor de GBP 1500 millones para inversionistas internacionales.
Los bonos del BIRF también ayudan a aumentar la concientización sobre la inseguridad alimentaria, un desafío de magnitudes globales que se vio exacerbado por la pandemia de COVID‑19. En septiembre de 2019, la entidad emitió bonos por un total de USD 500 millones, que respaldarán las actividades de financiamiento del Banco, incluidos USD 4600 millones para hacer frente a la pérdida y el desperdicio de alimentos, así como para reforzar la infraestructura, ampliar el acceso a los mercados y la logística, y mejorar la gestión de los residuos. Estas actividades sumaron, en total, USD 1700 millones en emisiones durante el ejercicio de 2020.
Como uno de los mayores emisores de bonos verdes, el BIRF respalda proyectos relacionados con el clima y, al mismo tiempo, ayuda a los inversionistas a apoyar soluciones de desarrollo para el cambio climático. Asimismo, contribuimos a que los países establezcan mercados de bonos verdes para demostrar liderazgo en materia de sostenibilidad y acción climática. Desde la emisión del primer bono del mundo denominado “verde”, en 2008, hemos generado USD 14 000 millones a través de más de 165 operaciones en 22 monedas. En noviembre de 2019, emitimos un bono verde a 20 años por valor de DKK 3000 millones (3000 millones de coronas danesas), el primer bono verde denominado en esta moneda y el de vencimiento más prolongado que haya ofrecido un Gobierno soberano, una entidad supranacional o un agente emisor en el mercado danés.
Proporcionamos asistencia técnica a emisores subnacionales y soberanos de mercados emergentes, como en el caso de Colombia, Indonesia, Kenya y Malasia. También publicamos el documento Guide on Developing a National Green Taxonomy (Guía para la formulación de una taxonomía nacional de inversiones verdes), a fin de promover el financiamiento sostenible en los mercados emergentes; realizamos encuestas a emisores e inversionistas sobre cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza, y organizamos talleres para facilitar el diálogo entre los emisores soberanos y los inversionistas. Ayudamos, además, a los entes reguladores del sector financiero a implementar reformas para que los sistemas financieros se orienten más a las cuestiones ecológicas, lo que incluye pruebas de estrés del sector bancario en relación con el clima, así como marcos de divulgación y presentación de informes ambientales, sociales y de gestión para los inversionistas institucionales.
A través de iniciativas tales como el Programa Conjunto de Mercados de Capital, el GBM presta asistencia técnica para ayudar a las economías de desarrollo y de mercados emergentes a consolidar sus mercados de capital y movilizar capital privado en moneda local, de modo que puedan incrementar el financiamiento para sectores estratégicos, como los de infraestructura, vivienda, agricultura y pequeña y mediana empresa.
Gestionar los riesgos de desastres a través de los mercados de capital mundiales
La plataforma de seguros contra riesgos de desastres del Banco ayuda a los países miembros a gestionar los riesgos relacionados con los desastres naturales, incluidas las pandemias, a través de seguros y operaciones en los mercados de capital. En noviembre de 2019, emitimos bonos para casos de catástrofe que proporcionarán a Filipinas USD 225 millones en cobertura de seguros contra terremotos y ciclones tropicales durante tres años. Este fue el primer bono para casos de catástrofe auspiciado por un ente soberano asiático y que cotizó en una bolsa de valores de Asia, además del primer bono del Banco Mundial en la bolsa de valores de Singapur.
En México, respaldamos el programa de bonos para casos de catástrofe desde su inicio en 2005. En marzo de 2020, emitimos cuatro tramos de bonos para catástrofes para el Fondo de Desastres Naturales del país, que atrajeron a 38 inversionistas a nivel mundial y proporcionarán USD 485 millones en cobertura de seguros contra terremotos y huracanes durante cuatro años. Esta es la operación con bonos de catástrofes más grande y prolongada de México; con ella, el total de operaciones contra riesgos de desastres ofrecidas a los países miembros por el Banco asciende a un valor de casi USD 5000 millones.
Fortalecer el capital humano en la gestión de activos del sector público
La Alianza de Asesoría y Gestión de Reservas de la Tesorería del Banco Mundial ofrece servicios de fortalecimiento de la capacidad y de gestión de activos, según la demanda, a los administradores de activos del sector oficial. Ayuda a bancos centrales, fondos de pensión y fondos soberanos de inversión a formar capital humano y reforzar las operaciones a través de misiones de asesoría, talleres técnicos y conferencias internacionales.
La demanda de los servicios del programa continúa creciendo, y ya se brinda asistencia a 75 instituciones, incluidas 9 de países de ingreso bajo y 7 de países afectados por situaciones de fragilidad y conflicto. En el ejercicio de 2020, la alianza dio a conocer su segunda encuesta bienal sobre prácticas de gestión de reservas de los bancos centrales, en la que se destacaban los avances logrados por estas instituciones en los ámbitos de gestión interna y manejo de riesgos.