Mejoramos las operaciones para obtener resultados más adecuados en los países
A fin de prestar mejores servicios a nuestros clientes y asociados, nos esforzamos por mejorar nuestras operaciones, políticas y procesos para ser una institución más eficaz y eficiente y maximizar nuestro impacto en el desarrollo.
El Marco Ambiental y Social del Banco Mundial
El Marco Ambiental y Social (MAS) del Banco entró en vigor el 1 de octubre de 2018 y se aplica a todas las nuevas operaciones de financiamiento para proyectos de inversión cuyas reuniones para tratar la nota conceptual se hayan realizado a partir de esa fecha. Ofrece una cobertura amplia y sistemática de los riesgos ambientales y sociales, y plantea importantes avances en esferas tales como la transparencia, la no discriminación, la participación pública, la protección de las personas vulnerables y desfavorecidas, la intervención de las partes interesadas y la rendición de cuentas, incluidos los mecanismos de atención de reclamos.
A medida que ejecutamos los proyectos de conformidad con el marco, ampliamos nuestra capacidad y las aptitudes del personal, modernizamos los sistemas de operaciones, revisamos los procesos y fortalecemos la capacidad de los prestatarios para mejorar la gestión de los riesgos. Hemos ofrecido materiales de orientación, modelos de documentos y otros recursos sobre temas de importancia clave, como no discriminación y discapacidad; prevención de la explotación, el abuso y el acoso sexual; utilización de personal de seguridad; seguridad vial, y seguimiento a cargo de terceros. El marco también ha impulsado el diálogo con los prestatarios sobre los nuevos requisitos —más claros—, mientras que los nuevos procesos y documentos de los proyectos han contribuido a reforzar la transparencia, la rendición de cuentas y la intervención de las partes interesadas.
Debido a que los contratistas son responsables de aplicar muchos aspectos de estas normas, hemos integrado el MAS en los procesos de adquisiciones. Los contratos de los proyectos ahora incorporan requisitos para prevenir el trabajo infantil y el trabajo forzado; garantizar la salud y seguridad ocupacional y de las comunidades; gestionar la cadena de suministro y las inspecciones, y abordar la explotación, el abuso y el acoso sexual.
Como parte de la respuesta rápida a la pandemia de COVID‑19, los países y los equipos del Banco han preparado proyectos de emergencia sin descuidar las sólidas políticas ambientales y sociales y las normas de gestión de riesgos de la organización.
El Marco de Adquisiciones del Banco Mundial
El Marco de Adquisiciones del Banco promueve enfoques a medida para las operaciones de financiamiento para proyectos de inversión. Permite que los proyectos respondan rápidamente a las nuevas necesidades y ayuda a los clientes a buscar la optimización de los recursos para garantizar resultados de calidad y la sostenibilidad durante todo el ciclo del proyecto. Al centrar la atención en las investigaciones de mercado, los análisis de necesidades y los riesgos específicos de los proyectos —incluidas las cuestiones ambientales y sociales—, ayudamos a los países a formular estrategias y planes de adquisiciones que satisfagan sus necesidades y aborden los contextos operativos de los proyectos para garantizar una ejecución exitosa.
El marco ha respaldado nuestra respuesta de emergencia ante la pandemia de COVID‑19, y, en el ámbito de los proyectos, se han adoptado medidas flexibles para proceder con mecanismos de adquisiciones acelerados, aunque sin descuidar la supervisión fiduciaria. Hemos actuado con rapidez a fin de incorporar las adquisiciones facilitadas por el Banco para clientes que habían solicitado asistencia con la compra de suministros y equipos médicos de gran necesidad en un momento en que la pandemia generaba volatilidad de precios, tiempos de espera prolongados, interrupciones de las cadenas de suministro y riesgos relacionados con la transparencia y la integridad. Esta opción ayuda a los países a identificar a proveedores interesados, negociar precios y condiciones, y gestionar la logística de tercerización, un enfoque que ha tenido buena recepción entre los fabricantes, los proveedores y los Gobiernos. Los países continúan siendo responsables de firmar e implementar los contratos. A julio de 2020, se habían firmado o se estaban por firmar 27 contratos con este enfoque, por valor de USD 105 millones.
Hemos mejorado el alcance del sistema de apoyo ampliado y directo para las adquisiciones, que ayuda a los clientes a implementar procesos eficaces, en particular para las operaciones que abordan los impactos de la COVID‑19. En el ejercicio de 2020, proporcionamos apoyo para 70 proyectos.
Nuestros mecanismos de adquisición alternativos (MAA) permiten realizar las adquisiciones a través de otras organizaciones, incluidos otros BMD y agencias de las Naciones Unidas, así como organismos gubernamentales aprobados por el Banco en el contexto de operaciones financiadas por este; hemos utilizado estos mecanismos con agencias de las Naciones Unidas para responder en casos de FCV, como en Sudán del Sur y Yemen. En el ejercicio de 2020, 19 proyectos incluyeron MAA con agencias de las Naciones Unidas y otros BMD.
Luego de la aplicación del MAS del Banco, revisamos todos nuestros documentos estándar de adquisiciones (DEA) relativos a obras, a fin de garantizar que los contratistas que participaran en los proyectos de financiamiento del Banco gestionaran adecuadamente los riesgos ambientales y sociales para proteger a las personas y al medio ambiente. También mejoramos los DEA y los procesos para ayudar a prevenir, mitigar y gestionar los riesgos como parte de medidas más amplias y concertadas para proteger a las comunidades vulnerables y abordar los casos de explotación, abuso y acoso sexual en los proyectos financiados por el Banco. En el ejercicio de 2020, completamos un conjunto de medidas destinadas a continuar mejorando el desempeño y la rendición de cuentas de los contratistas. Y para respaldar un proceso acelerado de operaciones durante la pandemia de COVID‑19, preparamos rápidamente un conjunto de DEA de emergencia simplificados.
El Marco de Adquisiciones se aplica a los proyectos con una nota conceptual de fecha 1 de julio de 2016 o posterior, por lo que no todos los proyectos de la cartera activa se incluyen en esta categoría. Supervisamos y evaluamos de cerca la aplicación del marco a nivel de proyectos, países, regiones y el mundo. En el ejercicio de 2020, un 44 % de la cartera de proyectos de inversión del Banco (un 36 % del valor en dólares estadounidenses) seguía las Regulaciones de Adquisiciones para Prestatarios en Proyectos de Inversión del marco. Gracias a la incorporación de un módulo de quejas en nuestra herramienta en línea para la planificación y el seguimiento de las adquisiciones, ahora podemos supervisar mejor los reclamos de este tipo. En el primer año, esto dio lugar a un incremento del 52 % en la cantidad de quejas registradas. Sin embargo, después del análisis inicial, solo el 18 % de las quejas atendidas se resolvió a favor del demandante, lo que indica que estamos aplicando adecuadamente los criterios de equidad y transparencia en nuestros procesos.
En el ejercicio de 2020, examinamos alrededor de 2072 contratos por un valor aproximado de USD 7400 millones y ofrecimos 890 días de capacitación sobre fortalecimiento de la capacidad e intercambio de conocimientos para aproximadamente 18 800 personas, entre funcionarios de los Gobiernos y empleados que trabajan en los proyectos.
Para incrementar el acceso a oportunidades de adquisiciones en virtud de proyectos financiados por el Banco, pusimos en marcha un servicio de suscripción sin cargo que ofrece alertas sobre avisos de adquisiciones y publicaciones de otorgamiento de contratos relativos a nuestras operaciones
Reformar los fondos fiduciarios para aumentar la eficiencia y la supervisión
Los fondos fiduciarios complementan la labor del BIRF y de la AIF proporcionando recursos financieros y contribuyendo con conocimientos sobre el desarrollo. Respaldan el programa sobre bienes públicos mundiales en lo que respecta a desafíos de desarrollo clave como el cambio climático, la fragilidad, el desplazamiento forzado y las pandemias; contribuyen a atraer nuevas fuentes de financiamiento; promueven soluciones financieras innovadoras, y ayudan al Banco a aprovechar su poder de convocatoria a nivel mundial.
Los montos que los fondos del Banco mantenían en custodia al final del ejercicio de 2020 eran de USD 12 200 millones en el caso de los fondos fiduciarios y USD 24 200 millones en el caso de los fondos de intermediarios financieros (FIF). Los fondos fiduciarios del Banco financian cerca de dos tercios de los servicios de análisis y asesoría de la institución, y alrededor del 74 % (USD 14 100 millones) de los desembolsos totales de estos grupos se destinaron a los países clientes en los ejercicios de 2016-20. De este monto, más de USD 11 600 millones se desembolsaron para países que pueden recibir financiamiento de la AIF y financiamiento combinado del BIRF y de la AIF. Las contribuciones a los FIF alcanzaron un promedio de USD 7900 millones anuales, mientras que las transferencias monetarias a las entidades de ejecución se mantuvieron relativamente estables, con una transferencia media anual de USD 6200 millones en los últimos cinco años.
El núcleo de las reformas en curso de los fondos fiduciarios es mejorar la alineación estratégica, incrementar la eficiencia y aumentar la supervisión de esta cartera para brindar soluciones a los clientes, al tiempo que se ofrece una optimización de recursos a los donantes. Una medida clave es la introducción del Enfoque General 2.0, que reducirá la fragmentación de los proyectos de la cartera. En el ejercicio de 2020, las prácticas mundiales y las regiones del Banco revisaron su cartera total de 526 fondos fiduciarios y señalaron oportunidades de consolidación: en lo sucesivo, 70 propuestas de programas del Enfoque General 2.0 servirán de base para la mayoría de las actividades de obtención de fondos. También actualizamos nuestro Marco de Gestión de los FIF a fin de reforzar la selectividad en el futuro mediante un nuevo menú de opciones para responder a llamados internacionales de acción colectiva.
Servicio de Atención de Reclamos
El Servicio de Atención de Reclamos constituye una vía para que las personas y comunidades que consideran que se han visto o probablemente se verán afectadas de manera adversa por un proyecto financiado por el Banco puedan plantear sus inquietudes directamente ante ese organismo. Se estableció en 2015 a partir de las recomendaciones formuladas por el Grupo de Evaluación Independiente en un examen de las políticas de salvaguarda. Este servicio complementa los mecanismos de reclamo de los proyectos y garantiza que las quejas recibidas a nivel institucional se aborden de forma inmediata y proactiva fomentando el diálogo y aplicando las herramientas de resolución de diferencias que resulten pertinentes.
El servicio se fue volviendo conocido, y la cantidad de casos aumentó de 4 en el ejercicio de 2015 a 225 en el de 2020. Las inquietudes planteadas abarcan una amplia variedad de reclamos, desde perjuicios en relación con los medios de subsistencia de las personas y degradación ambiental hasta cuestiones de salud y seguridad ocupacional. La experiencia de cinco años de manejar reclamos y los comentarios internos y externos que se recibieron nos han permitido reflexionar sobre lo que marcha bien y lo que se podría mejorar en los procesos y el funcionamiento del servicio. Estamos trabajando para fortalecer la labor en esta esfera, en particular mediante el establecimiento de políticas, la actualización de sistemas y procesos, y una mayor divulgación de nuestras prácticas.