“El riego es la vida. Nosotros vivimos y comemos de nuestros terrenos, si no hay agua no hay nada”, comenta Hilda Rosalía Allaica Guamán, presidenta de la Junta de Riego de Daldal de la parroquia Pungalá, provincia de Chimborazo, Ecuador.
Como Hilda, más de tres mil personas y sus familias han visto mejorar su calidad de vida al sembrar diversos productos y en mayor cantidad.
Esto les genera alimentación segura para sus familias, más pasto para el ganado y mayor cantidad de productos para comercializar.
El Proyecto Inversiones para el Desarrollo de Chimborazo (PIDD) es financiado por el Banco Mundial a través del Gobierno Autónomo Descentralizado de la Provincia de Chimborazo.
Su objetivo es mejorar la producción y el acceso al mercado para las familias rurales de las cuencas Chambo Chanchán-Chimbo de la provincia de Chimborazo. Esto se logra a través de inversiones en rehabilitación de sistemas de riego y mejoramiento de caminos.
Cuatro parcelas demostrativas han permitido evidenciar los beneficios del riego tecnificado en el incremento de la producción, lo que ha generado que los agricultores incursionen en otros cultivos de alto valor comercial como la arveja, maíz, frejol, papas, zanahoria, rábano y pastos como la alfalfa.
Don Segundo Cando, de la Comunidad Lucerito del cantón Riobamba, comenta cómo ha cambiado su vida: “yo antes me dedicaba a aserrar madera, en ocasiones tenía que salir y volver a la casa después de ocho o quince días. Ahora estoy dedicado solo a mis terrenitos, todo lo que produzco me sirve para mi familia”.
