¿Qué es una buena carretera para ti?

Cuando viajas en coche, ¿a qué aspectos prestas atención para valorar si la carretera es buena o mala? Para el ingeniero civil Aníbal Coelho da Costa, con 50 años en la profesión, la respuesta es compleja: “Desde el punto de vista del público general, una buena carretera es aquella que no tiene baches ni deformaciones importantes”, dice. “Pero los expertos ven que a veces la carretera está aparentemente libre de baches, pero con un desgaste acentuado, lo que indica que en poco tiempo, con un periodo de lluvia, el agua penetrará en el pavimento y se deteriorará rápidamente”, añade.

Una visita a las carreteras estatales mejoradas por el Programa de Recuperación y Mantenimiento de Carreteras de Bahía (PREMAR 1 y 2, de 2006 a 2014 y de 2016 a 2021), financiado por el Banco Mundial, ayuda a comprender estas diferentes percepciones. Además, muestra lo importante que fue la iniciativa para los residentes y lo mucho que aún queda por hacer para mejorar la infraestructura de transporte del estado.

En ambas fases, el programa recuperó 4000 km de pavimento: 1000 km en la primera y 3000 km en la segunda. Uno de los trabajos se llevó a cabo en el tramo de la BA-263 conocido como Serra do Marçal, conocido por su desnivel de más de 400 m (en solo 6 km) y curvas que parecen más bien codos doblados. En 2007, la carretera tuvo que estar cerrada durante casi seis meses para recuperarse. “El tráfico estuvo complicado en ese momento porque teníamos que dar un gran rodeo, pero funcionó”, recuerda Aníbal, quien trabajó en PREMAR 1 y 2.

Mauricio de Jesus Oliveira, gerente de una gasolinera, recuerda bien este momento: “En aquel momento, mucho menos gente pasaba por la región y teníamos menos clientes. En aquella época, había muchos baches en el camino desde aquí (el municipio de Itambé) hasta Vitória da Conquista. Además de las curvas, tenía que seguir esquivando los baches”. Hoy en día, está satisfecho con el estado de las vías. “No creo que falte nada”.

También con el apoyo de PREMAR, los 300 km que separan Paulo Afonso y Juazeiro se pueden hacer en cuatro o cinco horas, en lugar de los 12 antiguos. “Ahora me canso menos y voy con más calma”, dice el conductor José Correia.

Después de estas primeras e importantes mejoras, el equipo que trabaja en la preparación de un nuevo programa (Pró-Rodovias) detecta varios puntos de atención. Son válidos no solo para Bahía, sino también para otros estados que deben ser cubiertos por Pró-Rodovias (Espírito Santo, Rio Grande do Norte, Goiás, Tocantins, Santa Catarina, Mato Grosso do Sul y Piauí), así como para las carreteras federales administradas por el Departamento Nacional de Infraestructura de Transportes (DNIT) en el Nordeste. Es un paso importante para aumentar la seguridad vial en Brasil, país que ocupa el tercer lugar a nivel mundial en muertes en carretera, según un boletín del Observatorio Nacional de Transporte y Logística (ONTL).

Un buen camino tiene...

• Mantenimiento planificado, regular y de calidad, evitando que cualquier problema se profundice. Una carretera no permanece intacta: puede verse bien un día y mal al siguiente. De ahí la importancia de incluir la conservación en los proyectos de infraestructura. Con el cambio climático, que tiende a hacer que las lluvias y sequías sean cada vez más intensas y frecuentes, este punto cobra aún mayor relevancia. Si se produce erosión, por ejemplo, es importante actuar pronto para contenerla (antes de que sea mucho más costosa de reparar). A través de PREMAR 2 se crearon contratos a largo plazo, basados en el desempeño, es decir: el pago a las empresas constructoras se realizaba solo si se cumplían las condiciones pactadas (eliminar los agujeros, limpiar los drenajes, mantener la rugosidad dentro de los parámetros, etc.). “Pró-Rodovias va a mejorar estos contratos, asegurando el mantenimiento de las carreteras durante períodos más largos. El objetivo del programa es mejorar el acceso a oportunidades para la población a través de una conectividad más segura y resiliente a los impactos del cambio climático”, dijo Carlos Bellas Lamas, gerente del programa en el Banco Mundial.
• Drenaje bien hecho. Esta es una obra fundamental para toda carretera. De lo contrario, el agua que proviene del suelo comienza a infiltrarse y a producir grietas en el asfalto. A menudo, es necesario rehacerlo porque el anterior ya no es capaz de drenar el agua de los ríos y las lluvias, especialmente si (de nuevo, con el cambio climático), aumenta la intensidad de las lluvias en la región.
• Integración segura y asequible de las autopistas en las zonas urbanas. En las carreteras que atraviesan pequeños pueblos, siempre se pueden ver ciclistas y peatones. Para aumentar su seguridad, es necesario que haya aceras, carriles para bicicletas y áreas de protección. Estas obras benefician especialmente a las mujeres y a los niños pobres, ya que son quienes más caminan y montan en bicicleta.
• Barandillas correctamente instaladas, especialmente en curvas peligrosas, riberas de ríos y barrancos. En caso de accidente, son esenciales para ayudar a reducir la velocidad del vehículo y evitar más daños a la vida de los pasajeros. Por lo tanto, deben estar muy firmes en el suelo y a una altura adecuada (o, como dicen los ingenieros, en la plantilla adecuada). Si están demasiado bajos o con el poste suelto, no realizarán la función.
• Señalización constante y en buen estado. Mantenerlos así es responsabilidad tanto de la administración vial (pública o PPP) como de la población. Los grafitis y las placas robadas representan riesgos para los conductores, ciclistas y peatones, y requieren recursos adicionales para su reemplazo. Aníbal Coelho dice que el vandalismo sigue siendo común y, para contenerlo, es importante siempre concientizar a la comunidad. “A lo largo del programa, tuvimos cuidado de crear conciencia sobre lo que esto podría representar para su propio riesgo”, recuerda.
• Vigilancia, velocidad, adelantamiento y carga. ¿Sabías que sobrecargar los camiones hace que el suelo tienda a estropearse mucho más rápido, lo que hace que la necesidad de mantenimiento sea aún más frecuente? Se estima que, en Brasil, el 3% de los camiones circulan con cargas superiores a las recomendadas y representan la mitad de la degradación de las carreteras.

Finalmente, la carretera puede estar bien construida y mantenida, pero siempre puede haber accidentes si los conductores, ciclistas o peatones actúan de manera imprudente. En la intersección de las calles BA-142 y BA-026 -tramo a contemplar en Pró-Rodovias-, un conductor que no quiso ser identificado volcó un camión de gas porque se quedó dormido al volante. Se había despertado a las 3 de la madrugada para tomar la carga y se había quedado dormido. Cuando se despertó, ya estaba girando a la izquierda y volcándose. Derribó un poste de luz. No hubo heridos ni muertos.

“Las autopistas siempre deben diseñarse teniendo en cuenta que los humanos cometemos errores, como explica el concepto de Visión Cero. Deben construirse y mantenerse de tal manera que, incluso en caso de accidente o fenómeno meteorológico extremo, el daño a la vida y a la propiedad sea lo menor posible”, dijo Carlos Bellas, del Banco Mundial.