El Banco Mundial, el Gobierno Boliviano y los Departamentos de Potosí y Chuquisaca aliados para el desarrollo de una región desatendida.
WASHINGTON,D.C., 27 de mayo 2014– El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial (BM) aprobó hoy el financiamiento de US$50 millones de dólares para un programa de electrificación rural que extenderá las redes eléctricas y sistemas solares fotovoltaicos domésticos a 27 mil hogares, 130 escuelas y centros de salud de los Departamentos de Potosí y Chuquisaca, al suroeste de Bolivia.
“Se ha gestionado ante el Banco Mundial el financiamiento de la segunda fase del Proyecto Infraestructura Descentralizada para la Transformación Rural II (IDTR), que se encuentra enmarcado dentro de la Agenda Patriótica 2025 para la universalización de los servicios básicos como un derecho humano y como parte de la lucha contra la pobreza”, afirma Hortensia Jiménez, Viceministra de Electricidad y Energías Alternativas. “Se han considerado inicialmente a los Departamentos de Chuquisaca y Potosí, tomando en cuenta los criterios de mayores índices de pobreza y menor cobertura eléctrica beneficiando de esta manera a los sectores más vulnerables del área rural”.
La coordinación y ejecución del IDTR II será responsabilidad del Ministerio de Hidrocarburos y Energía en un marco nacional descentralizado en el que trabajará conjuntamente con las Gobernaciones de Potosí y Chuquisaca. Entre tanto, los municipios identificarán la demanda, apoyarán en el diseño de los subproyectos de extensión de red junto con las empresas de distribución, y serán responsables de la operación y mantenimiento de los sistemas solares fotovoltaicos, contribuyendo así a la sostenibilidad de las inversiones.
El Banco Mundial viene apoyando los programas de electrificación de Bolivia desde 2003 con operaciones como el Proyecto de Infraestructura Descentralizada para la Transformación Rural que llevó electricidad a más de 30 mil familias y el Proyecto Electricidad Descentralizada para el Acceso Universal que benefició a 12 mil hogares con el apoyo de la Asociación Mundial para la Ayuda en Función de Resultados.
Los objetivos del nuevo proyecto están plenamente alineados con la Alianza Estratégica 2012- 2015 del Banco Mundial con Bolivia en dos de sus cuatro pilares: Desarrollo productivo sostenible y desarrollo humano y acceso a los servicios básicos.
“El acceso a servicios modernos de electricidad para 27 mil hogares, tendrá un impacto directo y positivo sobre la reducción de la pobreza y el aumento de la inclusión social. La electricidad les permitirá mejorar su calidad de vida y generará mejores oportunidades de desarrollo económico y social”, afirma el Representante Residente del Banco Mundial en Bolivia Faris Hadad-Zervos.
Según el Censo de 2012, la cobertura eléctrica en el país ha llegado a 80,95 por ciento pero con importantes variaciones entre las regiones. Una gran parte de la población no atendida se concentra en los departamentos más pobres: En Chuquisaca 46 mil hogares siguen sin tener acceso, lo que representa 31 por ciento de las viviendas; en Pando 7.100 hogares o 28 por ciento de los hogares: en Beni 16.600 o 18 por ciento y en Potosí 71.300 hogares o 30 por ciento. Chuquisaca y Potosí representan el mayor porcentaje de hogares sin servicios de electricidad en Bolivia, un total de 117 mil hogares entre ambos y el 30 por ciento del total de la población.
El monto total del proyecto será de US$59 millones de dólares. A los US$50 millones del Banco Mundial se suman US$5 millones que serán aportados como fondos de contrapartida de las Gobernaciones y Municipios de Potosí y Chuquisaca y US$4 millones que vendrán de la contribución de los beneficiarios locales. El crédito de la Asociación Internacional de Desarrollo tiene un periodo de repago de 25 años, con 5 años de gracia.
