Desafío
Según proyecciones, para 2030, 574 millones de personas —casi el 7 % de la población mundial— vivirán en la pobreza extrema. Los crecientes impactos del cambio climático, la inseguridad alimentaria y los conflictos arraigan la pobreza entre los más vulnerables. Como resultado, muchos Gobiernos procuran encontrar estrategias basadas en evidencias para abordar este panorama de prioridades contrapuestas. La inclusión económica, a través de su enfoque multifacético, constituye una solución flexible que puede facilitar el acceso a medios de subsistencia sostenibles, promover el empoderamiento económico de las mujeres y aumentar la resiliencia de los hogares y las comunidades ante las crisis y el cambio climático. Sin embargo, pese al incremento de estos programas en los últimos años, la ampliación de estos se ve afectada por las limitaciones fiscales y de capacidad, y se requiere asistencia técnica y financiera permanente.
Enfoque
Recientemente, se ha producido un impulso mundial para mejorar la inclusión económica de los más pobres, a fin de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), específicamente el relacionado con poner fin a la pobreza para 2030. La AIE apunta a apoyar este objetivo promoviendo la adopción y ampliación de programas de inclusión económica gubernamentales a través de tres áreas de atención: participación de los países, datos y aprendizaje, y asociaciones. La Alianza ha proporcionado USD 4,2 millones en donaciones a 19 equipos del Banco Mundial a cargo de las operaciones en los países, y se han movilizado USD 1700 millones en financiamiento del Banco Mundial. Además, la AIE aprovecha su amplia red de asociados para brindar apoyo técnico a pedido, transformar las experiencias adquiridas en determinados países en bienes públicos y promover la generación de datos sobre los impactos de los programas gubernamentales. En el contexto de las crisis en curso, la AIE continuará apoyando a los países clientes en sus esfuerzos de crear resiliencia, mediante programas y estrategias de inclusión económica.
Resultados
La AIE ha apoyado a numerosos equipos de los países que asisten a los Gobiernos en el diseño y la implementación de programas y estrategias de inclusión económica. Los siguientes son algunos ejemplos destacados:
- En Zambia (i), el Proyecto de Medios de Subsistencia, Empoderamiento de las Mujeres y Educación de las Niñas (GEWEL) ha proporcionado oportunidades de subsistencia a unas 96 000 mujeres pobres y vulnerables. En un esfuerzo por aumentar el acceso de las mujeres a mejores oportunidades de subsistencia, los equipos del Gobierno y el Banco, en colaboración con la AIE, trabajan para complementar estas actividades de inclusión económica y garantizar el acceso a los mercados conectando a las participantes de GEWEL con el Proyecto de Agroindustria y Comercio de Zambia.
- En Panamá (i), el equipo de protección social del Banco Mundial y la AIE apoyaron al Gobierno en la creación del programa Cohesión Social a través de actividades de intercambio de conocimientos, diagnósticos preliminares y apoyo para la recopilación de datos. Todo ello ayudó a ampliar el programa y llegar a unos 3000 participantes en los territorios indígenas. El programa, ejecutado en asociación con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) desde mediados de 2019 hasta 2021, permitió aumentar la productividad de los participantes, quienes adoptaron un mayor número de buenas prácticas agrícolas, plantaron superficies más extensas, tuvieron una mayor cantidad de animales domésticos y mostraron una actitud más positiva hacia el riesgo. La comercialización también aumentó, y se informaron valores de ventas más altos.
- En Egipto (i), el Gobierno ha mostrado mayor interés en materializar el potencial productivo de los pobres. En respuesta, el equipo del Banco Mundial a cargo de las operaciones en el país y la AIE han apoyado la puesta en marcha de una iniciativa piloto de inclusión económica del Ministerio de Solidaridad Social denominada FORSA (“Oportunidad” en árabe). FORSA ha ayudado ya a más de 35 000 beneficiarios directos —de un total de 50 000 personas— para que obtengan empleos sostenibles a través de una serie de actividades como capacitación conductual, facilitación del trabajo asalariado y por cuenta propia, desarrollo de habilidades y orientación.
- En Bangladesh (i), el Banco Mundial ayudó al Gobierno a utilizar programas de inclusión económica en sus esfuerzos de recuperación después de la COVID-19 a través del Proyecto de Recuperación y Avance del Empleo en el Sector Informal (RAISE). En 2021, el equipo de la AIE trabajó con el equipo del país proporcionando aportes técnicos para apoyar el diseño de una red comunitaria encargada de realizar actividades de inclusión económica (dando apoyo a 175 000 beneficiarios), que incluyen apoyo psicosocial, dirigido especialmente a las mujeres y centrado en la exposición a los peligros climáticos.
Contribución del Banco Mundial
La AIE ha proporcionado USD 4,2 millones en donaciones para ayudar a diseñar o implementar una cartera estratégica de 20 programas nacionales de inclusión económica en 19 países, y se ha movilizado un total de USD 1700 millones en financiamiento del Banco Mundial. Según estimaciones de la AIE, toda la cartera de programas de inclusión económica del Banco Mundial consta de 276 iniciativas que reciben un financiamiento de alrededor de USD 19 300 millones (hasta enero de 2023).
Asociados
Los asociados que otorgan financiamiento del fondo fiduciario de múltiples donantes (MDTF) de la AIE son Co-Impact, BRAC, Irish Aid y la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ), encargada por y en nombre y por cuenta del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania (BMZ).
Los asociados técnicos de la AIE son los siguientes: el Proyecto BOMA, CARE, Concern Worldwide, la FAO, la Fundación Capital, Ideas42, Innovations for Poverty Action (IPA), Results, Trickle Up, ACNUR, Village Enterprise y World Vision.
De cara al futuro
La AIE se compromete a continuar apoyando la adopción y ampliación de los programas de inclusión económica gubernamentales para abordar las necesidades apremiantes de reducir la pobreza extrema, mejorar el empoderamiento económico de las mujeres y crear resiliencia ante las crisis y el cambio climático. En el futuro, la AIE intensificará sus esfuerzos para comprender y difundir información sobre cómo los Gobiernos encuentran soluciones sostenibles para las personas que viven en la pobreza extrema. Estos esfuerzos incluyen aprender de qué manera los programas se adaptan para alinearse con los contextos locales y comprender las estrategias que pueden utilizar los Gobiernos para ampliar estos programas y hacer frente al desafío cada vez mayor que plantea el aumento del número de personas que viven en la pobreza extrema.