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ARTÍCULO Octubre 01, 2020

Cómo "hibernar" empresas para una recuperación resiliente del COVID-19

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TITULARES

  • Los gobiernos de todo el mundo han implementado una serie de acciones para amortiguar los efectos del impacto económico provocado por COVID-19, mientras continúan las medidas de contención necesarias para salvar vidas. Una parte fundamental de la discusión es cómo evitar que quiebren las empresas, muchas de las cuales ya han sido golpeadas por un colapso en las ventas y una caída en los ingresos. Una idea es ayudarlas a "hibernar" hasta que se reanude la actividad.
  • Sergio Schmukler, Gerente de Investigación y coautor del artículo "Financiamiento de empresas en hibernación durante la pandemia COVID-19", ha elaborado desde el Centro de Investigación y Desarrollo de Chile, una explicación de cómo se puede ayudar a las empresas a que hibernen. Este trabajo fue realizado con los economistas Tatiana Didier, Federico Huneeus y Mauricio Larrain, del Banco Mundial, el Banco Central de Chile y la Comisión de Mercados Financiero de Chile, respectivamente.

¿A qué se refiere con empresas en "hibernación"? ¿Es ésta una forma de "congelar" la economía?

Algunos han abogado por "congelar" la economía para que pueda reanudarse más tarde. Pero como no es posible paralizar completamente la economía, en el artículo proponemos que un mejor término es "hibernar" a las empresas. Esta es una forma de evitar los costos económicos de romper las valiosas relaciones de las mismas con sus “stakeholders” (o contrapartes) y de caer en la bancarrota.

Para hibernar, una firma deberá estar segura de tener el mínimo de efectivo necesario para resistir las cuarentenas y la parálisis por la pandemia y las medidas de distanciamiento social. Necesitará tener el efectivo suficiente para preservar relaciones con las contrapartes, y adaptar las actividades para evitar paralizar algunas tareas esenciales.

Para sobrevivir, es posible que una compañía deba ajustar los pagos a los proveedores y trabajadores, por ejemplo, y garantizar que las relaciones sigan siendo viables a largo plazo. Los responsables de la formulación de políticas tendrían que encontrar formas de garantizar que las empresas, que no tienen efectivo a mano, dispongan de crédito para superar este período.

¿Qué consideraciones deben tener en cuenta los responsables de la formulación de políticas al diseñar este tipo de respuestas?

La mayoría de los gobiernos tienen recursos limitados y deberán establecer prioridades y estar al tanto de las consecuencias de sus acciones al decidir cómo evitar que las empresas colapsen durante la pandemia.

Las necesidades son urgentes y estas decisiones deberán tomarse rápidamente. Los hacedores de políticas también tendrán que determinar si condicionan la asistencia para mantener ciertas relaciones sobre otras, como exigir a las empresas que mantengan a los trabajadores en nómina.

¿Es el tiempo un factor en la respuesta de política?

Los gobiernos necesitarán programar estratégicamente su apoyo. Las empresas pueden estar en hibernación y necesitar fondos durante varios meses para superar el período de baja actividad económica. Es un momento en que los acreedores privados pueden retroceder y puede que sea precisamente cuando más se necesite la ayuda del gobierno.

A medida que las empresas sobrevivientes emerjan de la hibernación y necesiten líneas de crédito adicionales para reiniciar o reactivar sus operaciones, los prestamistas privados podrían estar más inclinados a financiarlas cuando la incertidumbre haya disminuido y estarían en una mejor posición para evaluar las perspectivas de las empresas y los riesgos crediticios.

¿Estamos equipados con la infraestructura financiera adecuada?

Las infraestructuras legales y regulatorias existentes no están diseñadas para hacer frente a un impacto externo como la pandemia de COVID-19 y, de hecho, pueden amplificar los problemas al penalizar a las empresas en apuros. A la luz de esto, los responsables de la formulación de políticas están innovando y reevaluando sus respuestas de política financiera mientras se resuelve la crisis sanitaria. Esto significa trabajar con el sector financiero y adaptar la infraestructura financiera para mejorar las posibilidades de supervivencia de empresas viables.

Sus ideas sugieren que responder a esta crisis requerirá un enfoque muy diferente al del pasado. ¿Por qué?

Normalmente, la respuesta óptima a una crisis financiera es identificar y aislar rápidamente la parte del sistema financiero (o del sector real) que tiene problemas. Esta vez, sin embargo, la mayoría de los sectores de la economía mundial gozaban de buena salud antes de que ocurriera la pandemia. Por lo que la activación de los mecanismos estándar de resolución de crisis podrían en realidad reducir el financiamiento a las empresas en lugar de proporcionar los fondos temporales que necesitarían para mantenerse a flote.

Hay un intenso debate acerca de las políticas de financiamiento a empresas durante la pandemia, ya que muchas se ven empujadas hacia la bancarrota. Es esencial para esta discusión decidir qué opciones de política pueden ser óptimas dados los desafíos que enfrentan las autoridades cuando intenten salvar a las empresas del colapso, así como los incentivos que estas opciones generan.



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