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COMUNICADO DE PRENSA Agosto 30, 2020

Se necesitan medidas y cambios decisivos para reformar y reconstruir un Líbano mejor

La explosión ocurrida en Beirut provocó daños a la infraestructura y los activos físicos por valor de hasta USD 4600 millones, según una nueva evaluación

Ciudad de Washington, 30 de agosto de 2020. En una nueva evaluación de los daños y las necesidades derivados de la explosión del 4 de agosto que sacudió a la ciudad de Beirut se exhorta a reconstruir un Líbano mejor, sobre la base de los principios de transparencia, inclusión y rendición de cuentas, con el propósito de satisfacer las demandas y las aspiraciones del pueblo libanés.

Para ayudar a orientar la respuesta mundial que se necesita con urgencia, el Grupo Banco Mundial, con la cooperación de las Naciones Unidas y la Unión Europea, llevó a cabo una evaluación rápida de daños y necesidades (ERDN), en estrecha alianza con ministerios, organizaciones de la sociedad civil y otras partes interesadas clave del Líbano.

De acuerdo con estimaciones preliminares de la ERDN, los daños que la explosión ocasionó a los activos físicos se ubican en el rango de los USD 3800 millones a USD 4600 millones, mientras que las pérdidas, incluidos los cambios en los flujos económicos como resultado de la disminución de la producción de los sectores económicos, se estiman en el orden de los USD 2900 millones a USD 3500 millones. Los sectores más seriamente afectados son la vivienda, el transporte y los bienes culturales materiales e inmateriales (como los sitios religiosos y arqueológicos, los monumentos nacionales y de otra índole, los teatros, los archivos y las bibliotecas).

Las necesidades de reconstrucción y recuperación del sector público para este año y el próximo se calculan entre los USD 1800 millones y USD 2200 millones, de los cuales de USD 605 millones a USD 760 millones se necesitan de inmediato y hasta diciembre de 2020, y entre USD 1180 millones y USD 1460 millones se requieren a corto plazo para el año 2021. El sector con necesidades más ingentes es el transporte, seguido de la cultura y la vivienda.

"Si bien sus estimaciones son preliminares debido a la rapidez y a las difíciles circunstancias en las que ejecutamos la evaluación junto a nuestros asociados, la ERDN sienta las bases de una agenda de reforma, recuperación y reconstrucción que infunde la esperanza de un futuro mejor para todos los libaneses, en el que el pueblo libanés tenga un papel rector", dijo Saroj Kumar Jha, director regional del Banco Mundial para el Mashreq. "Esta tragedia es un llamado de atención para las autoridades libanesas y una exhortación a emprender reformas de inmediato y a recomponer el contrato social entre el Estado y sus ciudadanos, que se ha quebrantado. Es lo que piden los jóvenes libaneses, y el Banco Mundial está resueltamente de su lado".

Los tres principales efectos económicos de la explosión son las pérdidas en la actividad económica causadas por la destrucción del capital físico, las perturbaciones del comercio y las pérdidas de ingresos fiscales del Gobierno. Incluso antes de la explosión, el Líbano enfrentaba una serie de crisis; las proyecciones del crecimiento del PIB real para 2020 se situaban en los dos dígitos negativos, impulsadas por las repercusiones del conflicto de Siria, a raíz del cual el Líbano sigue albergando el mayor número de refugiados per cápita del mundo; el país sufría una crisis financiera y económica caracterizada por un sector financiero deteriorado, una crisis cambiaria, altísimas tasas de inflación, un sector público en mora y los efectos de la pandemia de la COVID-19. El desastre no solo exacerbará la contracción de la actividad económica, sino que también aumentará la tasa de pobreza, que ya llegaba al 45 % de la población inmediatamente antes de la explosión.

"Camino a diario por Beirut y escucho historias de conmociones y de pérdidas. Hombres y mujeres que nunca habían tenido que pedir ayuda se han convertido en mendigos. Familias que han visto desaparecer sus hogares y su futuro. Niños que ya no se sienten seguros en sus vecindarios. Orgullosos hombres y mujeres de negocios que no pueden acceder a sus ahorros, sin posibilidad de comenzar de nuevo. Son estas personas las que deben constituir el núcleo del marco de recuperación, un marco que ofrezca soluciones reales a estos problemas tan reales, de manera que, juntos, la Unión Europea, el Banco Mundial y las Naciones Unidas puedan ayudar al Líbano a emprender los cambios institucionales, económicos y sociales imprescindibles para poner fin a las necesidades, restablecer la esperanza y la confianza, y no dejar a nadie atrás", dijo Najat Rochdi, coordinadora residente y de asuntos humanitarios de las Naciones Unidas.

Se estima que, solo en los próximos tres meses, resultará crítico para la recuperación disponer de USD 35 millones a USD 40 millones para una transferencia de efectivo inmediata en gran escala destinada a atender las necesidades básicas de 90 000 habitantes afectados y a crear empleos de corta duración para 15 000 personas. También es preciso dar albergue a las familias más vulnerables desplazadas, de bajos y medianos ingresos, así como reparar las viviendas con daños mínimos y parciales de las familias de ingresos más bajos. Las necesidades inmediatas en materia de vivienda se calculan entre los USD 30 millones y USD 35 millones, en tanto que las de corto plazo para el año 2021, entre los USD 190 millones y USD 230 millones. ImagePor otra parte, se necesitan con urgencia entre USD 225 millones y USD 275 millones para restablecer los servicios de 5200 microempresas y 4800 pequeñas empresas que dan empleo a miles de libaneses. Estas donaciones y estos préstamos en condiciones concesionarias dirigidos a la recuperación de pequeñas empresas cubrirán las necesidades de reconstrucción, equipamiento y capital de trabajo y permitirán reanudar las actividades y retener la mano de obra.

Las actividades de reconstrucción implicarán no solo la rehabilitación y la reconstrucción de los edificios y la infraestructura dañados, sino también el restablecimiento de las instituciones y las estructuras de gobierno. Con respecto al sector portuario, por ejemplo, en el informe se recomienda, además de ejecutar las obras de emergencia necesarias para asegurar las importaciones vitales para el Líbano, reconstruir el puerto con un criterio holístico y moderno, ampliarlo y emplazarlo en un mejor lugar, y dirigirlo aplicando las prácticas más eficientes y transparentes.

"La Unión Europea se solidariza plenamente con el pueblo del Líbano en estos momentos de conmoción y sufrimiento. El Líbano es un vecino cercano y un asociado, y estamos aquí para ayudar a los afectados por esta tragedia. Nuestra evaluación conjunta es esencial para comprender las necesidades y movilizar los recursos para la reconstrucción de Beirut, dijo Ralph Tarraf, embajador y jefe de la delegación de la Unión Europea en el Líbano. "Debemos cerciorarnos de que nuestra asistencia llegue a los necesitados. En estas circunstancias, la comunidad internacional insta una vez más a la dirigencia libanesa a asumir sus responsabilidades y sancionar las imprescindibles reformas. La explosión de Beirut es otro trágico recordatorio de la necesidad acuciante de mejorar la rendición de cuentas y la gestión de los asuntos del Estado y del Gobierno".

En la ERDN se recomienda "volver a construir mejor" a través de un marco de reforma, recuperación y reconstrucción que combine intervenciones que prioricen las necesidades de las personas, en particular las pobres y más vulnerables, con reformas estructurales vinculadas a la estabilización macroeconómica, la gestión de gobierno, el entorno en el que se desenvuelve el sector privado y la seguridad humana. Estas reformas deben prevenir la corrupción y deben centrarse en poner fin a la apropiación de los beneficios por parte de las élites, que han monopolizado los recursos tanto privados como públicos y han exacerbado el sufrimiento del pueblo libanés.

En vista del estado de insolvencia y la falta de suficientes reservas de divisas, la ayuda internacional y la inversión privada serán esenciales para una recuperación y una reconstrucción amplias. A fin de acceder a la asistencia oficial para el desarrollo y destrabar las fuentes de financiamiento externas y privadas será crucial que el Líbano implemente una agenda de reformas creíble.

El Banco Mundial, las Naciones Unidas y la Unión Europea se han comprometido plenamente a trabajar junto con el Líbano y su pueblo para construir de nuevo un Líbano mejor que ponga en primer plano las necesidades de su gente.


Contacto

En Beirut
Zeina El Khalil
External Affairs Officer
zelkhalil@worldbank.org
Naciones Unidas
Nadine Daou
Communications Officer, Resident Coordinator Office (RCO)/UNIC Beirut
daou@un.org
Delegación de la Unión Europea en Líbano
Tatiana Hosny Richa
Press and Information Officer
tatiana.hosny@eeas.europa.eu
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