Aunque la crisis por coronavirus nos ha obligado a separarnos para frenar su propagación, está reuniéndonos también de nuevas maneras. Para manifestar agradecimiento por quienes ayudan a nuestras comunidades, para mantenernos en contacto con nuestras familias donde sea que se encuentren y para ayudar a los más pobres y vulnerables. La COVID-19 amenaza con empujar a la pobreza extrema al menos a 40 millones de personas, y es por eso que el Grupo Banco Mundial también se está uniendo con asociados internacionales para responder a esta pandemia. Otorgará hasta USD 160 000 millones en los próximos 15 meses para ayudar a los países a combatir el virus y acelerar la recuperación. Juntos, podemos hacer una diferencia.
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