Uso de macrodatos en programas de lucha contra la pobreza para proteger a los pobres de Letonia

Abril 15, 2014


Image

Mientras Letonia se estaba recuperando de la crisis financiera y económica mundial de 2009, el Banco Mundial se asoció con el Gobierno durante 2012 y 2013 para estudiar políticas de impuestos, de prestaciones sociales y de capacitación destinadas a combatir el desempleo de larga duración e incorporar a las personas a la fuerza laboral. El estudio analizó datos administrativos detallados del seguimiento de las condiciones de los individuos en el mercado laboral y la utilización de programas de beneficios y de empleo y formación a través del tiempo para proporcionar asesoramiento normativo sobre reformas del sistema de impuestos y de beneficios sociales y el desarrollo de programas del mercado laboral. El Gobierno usó las recomendaciones de la investigación para fundamentar las futuras reformas en materia de políticas.

Desafío

La crisis financiera mundial afectó significativamente a Letonia: el producto interno bruto (PIB) combinado se redujo en casi un 25 % y el desempleo se triplicó de 6 % a 20 % entre 2007 y 2009. Aunque la economía se recuperó gradualmente, la tasa de desocupación se mantuvo elevada, ascendiendo a un 15 % a fines de 2011. Los trabajadores menos calificados sufrieron en forma desproporcionada las consecuencias del deterioro del mercado laboral. Las personas socialmente vulnerables, los desempleados por un largo periodo, y los que no estaban activos en el mercado laboral constituían un motivo de especial preocupación. Lograr que más personas volvieran a trabajar era fundamental para revertir la gravedad de la pobreza y la polarización social que se habían observado desde 2007. Casi dos tercios de los pobres de Letonia vivían en hogares con bajo nivel de empleo.

El Gobierno solicitó respuestas a preguntas relativas a la dependencia de los beneficios sociales; cómo cambiar el sistema tributario y de beneficios para ofrecer una protección adecuada y promover el empleo; cómo orientar los programas de búsqueda de trabajo y capacitación formal para que las personas volvieran a trabajar, y cómo el Gobierno puede usar su caudal de datos administrativos para cimentar la formulación de políticas basadas en pruebas en todas estas áreas.

Solución

El Ministerio de Bienestar Social de Letonia encomendó al Banco Mundial evaluar la situación del empleo y la protección social del país después de la crisis, teniendo en cuenta sobre todo a las personas desempleadas e inactivas. Se generó una serie de notas informativas usando una detallada encuesta administrativa de hogares y datos sobre gastos, en colaboración con expertos técnicos gubernamentales.

El estudio mostró cómo usar macrodatos para fundamentar un difícil debate de políticas sobre dependencia de la asistencia social, beneficios tributarios para los grupos de menores ingresos y programas de empleo. Para investigar estas cuestiones, se creó una gran base de datos de panel vinculando información sobre personas incluidas en las bases de datos de seguridad social, asistencia social, servicios de empleo, registro de la población y seguros de salud. Los datos correspondientes a 91 curvas mensuales desde enero de 2006 hasta julio de 2012 cubrieron el 43 % de la población total y permitieron al Banco investigar —con una base sólida de evidencias— los problemas de dependencia de las prestaciones sociales y el impacto de los programas laborales.

Al hacer participar a un gran número de partes interesadas en el estudio de principio a fin y realizar todos los análisis disponibles en línea y en conferencias públicas, el proyecto fue considerado objetivo y que no respondía a intereses políticos.

 


Resultados

Las principales conclusiones del estudio (que se completó en mayo de 2013) son:

  • Si bien la recuperación ha comenzado en Letonia, la demanda del mercado laboral aún tiene que recuperarse; la tasa de desempleo sigue siendo alta y la tasa de participación en el mercado laboral es menor que antes de la crisis.
  • Las personas con empleo inestable o sin trabajo pertenecen a diversos grupos; la población mayor de 50 años, los jóvenes con bajo nivel de educación y las madres con responsabilidades familiares representan un gran porcentaje del total.
  • No hay evidencia de que exista una dependencia de los beneficios en gran escala. Los programas de prestaciones no son generosos, tienen baja cobertura y en general funcionan como soluciones temporales para muchas personas y no como una fuente de ingresos permanente. El sistema de impuestos y beneficios podría modificarse para que se entreguen más recursos a los hogares de ingreso bajo. En particular, se recomienda una eliminación más gradual de las prestaciones.
  • El gasto en programas de beneficios basados en el nivel de ingresos es bajo.
  • Los programas del mercado laboral parecen mejorar las tasas de empleo, aunque existen variaciones en los resultados entre los distintos tipos de iniciativas.

El estudio proporcionó clara evidencia de que no existe una dependencia de los beneficios en Letonia, lo cual fue ampliamente difundido en los medios de comunicación y usado por el Gobierno para sustentar la necesidad de programas de lucha contra la pobreza.


Image

Contribución del Grupo del Banco Mundial

Letonia se graduó del Banco Mundial en 2007, pero volvió a acceder a financiamiento de manera excepcional tras la crisis de 2009. Como parte de este apoyo, el Banco Mundial otorgó un préstamo programático de 200 millones de euros para proteger a los grupos vulnerables mediante redes de protección social de emergencia durante la contracción de la economía. El estudio se centró en políticas permanentes para ayudar a los grupos de ingresos bajos y vulnerables a medida que la economía se recupera.

La asistencia se estructuró como un servicio de asesoría reembolsable (RAS, por sus siglas en inglés). El Gobierno de Letonia proporcionó la mayor parte de los fondos a través de su asignación del Fondo Social Europeo (200 000 lats), mientras que el Banco Mundial otorgó financiamiento inicial para poner en marcha el proyecto (US$30 000).

Asociados

El estudio abarcó los sectores de protección social, política fiscal, educación y capacitación, y salud. Aunque este fue solicitado por el Ministerio de Bienestar Social y la Agencia Estatal de Empleo, el Banco Mundial trabajó en estrecha colaboración con un comité directivo integrado por personal técnico de los ministerios de Hacienda, Salud, Economía y Educación, así como de la Oficina Central de Estadísticas.

La Comisión Europea (CE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) fueron asociados externos clave. El FMI participó en el diálogo con el Gobierno y aportó un economista fiscal al equipo. La CE entregó financiamiento para el estudio y está usando el análisis como base para el diálogo y la planificación de la próxima ronda de programación del Fondo Social Europeo (2014-19).


Próximos pasos

Actualmente, el Banco Mundial está terminando un nuevo acuerdo de RAS con Letonia para un estudio de seguimiento sobre el fomento del envejecimiento activo. La población de Letonia está envejeciendo rápidamente y el estudio encontró un significativo nivel de salida anticipada del mercado laboral o empleos de baja calidad entre la población de edad más avanzada. El Banco Mundial trabajará con el Gobierno en el análisis de opciones de políticas sobre impuestos y beneficios y políticas de salud, así como programas de capacitación y empleo y legislación laboral para mantener a las personas mayores en empleos satisfactorios.

Otras naciones de la Unión Europea y la Comisión Europea han expresado su interés en reproducir el estudio de Letonia. La metodología y el enfoque comenzaron a difundirse en otros países bálticos —Estonia y Lituania— durante visitas a estos en marzo de 2014.

 

 




Bienvenidos