DESAFÍO
En las últimas décadas, China ha logrado avances notables en el aumento de la esperanza de vida, la reducción de la mortalidad materna e infantil y la expansión del seguro de salud, en parte debido a las importantes reformas de salud iniciadas en 2009. Pero China también ha experimentado un rápido desarrollo socioeconómico y se ha enfrentado a desafíos sistémicos, como el envejecimiento de la población; una creciente carga de enfermedades no transmisibles; un sistema de salud centrado en los hospitales, fragmentado e impulsado por el volumen, y un énfasis inadecuado en la calidad de la atención de salud. Para responder a ello, el Gobierno de China se ha abocado a profundizar sus reformas de salud en curso en el marco del decimotercer plan quinquenal, que describe los objetivos y las metas de desarrollo del país hasta 2020. Durante la formulación de la reforma nacional de salud, el Gobierno chino buscó apoyo del Grupo Banco Mundial (GBM) para llevar a cabo un estudio del sector sanitario que ayudara a abordar estos desafíos basándose en las mejores prácticas internacionales y de China. Los resultados de ese estudio se incluyeron en el informe “Healthy China” de 2016.
ESTRATEGIA
El GBM publicó el informe “Healthy China” (i) en 2016, que incluye recomendaciones sobre reformas a la salud para mejorar la calidad y disminuir los costos de la atención médica en China. Este importante estudio se llevó a cabo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y tres ministerios del Gobierno chino.
Al comienzo del estudio se formó un grupo de trabajo técnico encabezado por el ministro de Finanzas de China y el director gerente del GBM. El grupo de trabajo, compuesto por expertos de los organismos gubernamentales, el GBM y la OMS, impulsó el diálogo, formuló comentarios y facilitó la disponibilidad de datos de investigaciones de diferentes departamentos gubernamentales. El estudio también se apoyó en 20 estudios de antecedentes, visitas a 21 provincias chinas, más de 30 estudios de casos nacionales e internacionales innovadores dirigidos por expertos internacionales sobre diversos temas, seis talleres técnicos y varias mesas redondas de consulta con asociados, círculos académicos e investigadores, y contó con la participación del Gobierno central y los Gobiernos provinciales seleccionados.
El programa fue innovador en dos sentidos: 1) en su diseño participaron directivos de alto nivel de China y del GBM y representantes de las comunidades, y 2) incluyó el mecanismo del programa por resultados, que convierte las principales tareas de la reforma en metas cuantitativas que se vinculan con el desembolso del préstamo del Banco Mundial, y exige que estas tareas sean supervisadas y evaluadas por terceros para asegurar la implementación.
RESULTADOS
El estudio determinó que, para lograr una atención médica de calidad asequible, responder a las crecientes necesidades sanitarias de la población y controlar aún más el aumento del gasto, China debe transitar a un modelo integrado que se centre en la atención primaria mediante reformas que armonicen los incentivos (pagos a los proveedores) con los resultados deseados. El estudio estimó que si China continúa “como de costumbre”, el gasto total en salud aumentará de 5,6 % del PIB en 2015 a 9,1 % en 2035, un incremento promedio anual de 8,4 %. Con las reformas, China podría lograr importantes ahorros anuales, equivalentes al 3 % del PIB.
Las recomendaciones del estudio fueron un valioso aporte para una nueva ronda de reformas nacionales propuestas a China como parte de su decimotercer plan quinquenal. En apoyo de estas reformas y aprovechando las mejores prácticas internacionales, el GBM comenzó en mayo de 2017 a implementar una operación de programas por resultados (PporR) de USD 600 millones del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) para apoyar una reforma del sistema de salud, pionera en el ámbito del desarrollo humano y el mayor préstamo que no es de emergencia entregado a China. El objetivo del PporR es mejorar la calidad y la eficiencia de los servicios de atención de la salud en las provincias de Anhui y Fujian a través de la reforma de los hospitales públicos, una atención médica centrada en las personas y sistemas transversales más sólidos.
Al enfocarse en mejoras de calidad y eficiencia cuantificables, se espera que el PporR se traduzca en mejores resultados de salud y una mejor calidad de vida, menores gastos para las personas y una mayor satisfacción de los pacientes. El programa tiene como objetivo transformar la prestación de servicios de salud para los más de 100 millones de habitantes de Anhui y Fujian.
CONTRIBUCIÓN DEL GRUPO BANCO MUNDIAL
El estudio fue financiado por el BIRF, y recibió aportes de la Corporación Financiera Internacional (IFC) y la Fundación Bill y Melinda Gates a través de un fondo fiduciario enfocado en resultados para el desarrollo.
Fue llevado a cabo por un equipo de expertos de las cinco organizaciones participantes, bajo la dirección del ministro de Finanzas de China y el director gerente del GBM. El equipo del GBM estuvo conformado por especialistas y consultores del sector de salud del BIRF y IFC, quienes contaron con el apoyo de expertos encargados de la evaluación y especialistas en comunicaciones. La supervisión continua del estudio fue realizada por los directores de las Prácticas Mundiales de Salud, Nutrición y Población y la Unidad de Gestión de las Actividades del GBM en China.