Sabemos que el cambio climático se está produciendo rápidamente. Entonces, cuando los Gobiernos se reúnan en Varsovia esta y la próxima semana para otra ronda de negociaciones internacionales sobre el clima, será responsabilidad de los encargados de las políticas y las finanzas evitar que la temperatura del planeta se eleve aún más.
¿Conseguirán evitar la crisis que se está gestando?
Al ritmo actual, el mundo se encamina hacia un incremento de 2°C en las temperaturas dentro de unas pocas décadas, y un aumento de 4°C por encima del periodo preindustrial para 2100. La ciencia es clara sobre lo que esto significa: habrá grandes inundaciones en las zonas costeras, escaseará el agua para las centrales hidroeléctricas y la agricultura, se producirán situaciones generalizadas de escasez de alimentos y probablemente las tormentas serán más intensas.
Si bien el cambio climático nos afecta a todos, sabemos también que las naciones y las comunidades pobres y vulnerables son las que están en peores condiciones de enfrentar un mundo semejante.
El equipo del Grupo del Banco Mundial que asiste a la cumbre de las Naciones Unidas en Varsovia aportará sus conocimientos y experiencia en temas directamente relacionados con el cambio climático, tales como: gestión de riesgos de desastres, financiamiento para el clima, mercados de carbono, desarrollo de energía y transporte no contaminantes, análisis económico y, por supuesto, pobreza.
El Banco no participa directamente en las conversaciones sobre el clima, conocidas oficialmente como la 19.a sesión de la Conferencia de las Partes (CP19). Sin embargo, como una de las principales organizaciones de desarrollo, juega un papel crítico en muchos de los programas de financiamiento relacionados que respaldan la adopción de medidas con respecto al cambio climático.
Los programas incluyen los fondos de inversión en el clima (CIF) (i) por US$7600 millones, destinados a ampliar el desarrollo con bajo nivel de emisiones de carbono y capacidad de adaptación al clima, y 15 iniciativas de financiamiento del carbono (i) de las cuales el Banco es depositario. La institución también ofrece apoyo financiero y experiencia en cuestiones climáticas a muchos de los países en desarrollo que estarán en la mesa de negociaciones en Varsovia.
Financiamiento para abordar cambio climático, máxima prioridad en Varsovia
Un tema de gran interés para el Banco en Varsovia es cómo aumentar el financiamiento que se necesita para crear infraestructura y soluciones energéticas con bajo nivel de emisiones de carbono, y ayudar a los países a adaptarse al cambio climático.
La comunidad internacional acordó en Copenhague en 2009 movilizar US$100 000 millones anuales a más tardar en 2020 con el fin de luchar contra el cambio climático, además de los US$30 000 millones que se comprometieron a recaudar hasta 2012 en el marco del financiamiento de arranque para los países en desarrollo. No se sabe si las naciones ricas podrán cumplir con la meta de 2020, y mucho menos si serán capaces de cerrar la brecha de aproximadamente US$700 millones (i) en concepto de inversión en infraestructura ecológica en las naciones en desarrollo que se requiere para enfrentar el desafío climático.
“Para adoptar medidas eficaces con respecto al clima, es fundamental lograr que el financiamiento se dirija a inversiones en bajas emisiones de carbono y trabajar donde es más importante”, dijo Rachel Kyte, vicepresidenta de Desarrollo Sostenible del Banco, quien llegará a Varsovia a finales de esta semana. “También es absolutamente crítico que veamos en Varsovia progresos en el financiamiento para abordar el cambio climático”.
El cambio climático aumenta los costos de desarrollo de los países más pobres entre un 25% y un 30%. Para adaptarse a un mundo 2°C más cálido, los países en desarrollo necesitarán hasta US$100 000 millones anuales en las próximas cuatro décadas, además de unos US$140 000 millones a US$175 000 millones para proyectos de reducción de emisiones antes de fines de 2030.
Solo mediante un esfuerzo coordinado de los bancos de desarrollo, las instituciones financieras, los organismos de crédito a la exportación, el financiamiento público y los inversores institucionales se podrá llevar a cabo la tarea.